mujercita encantadora
que se duerme con la luna
y despierta con la aurora.
Que tiene amores secretos
con el sol y los cocuyos
que a veces canta mis versos
enredados con los suyos.
Virgen de Guadalupe
cuida que ella sea buena
que no le falte nada
"pa" cuando yo me muera.
Con esa voz tan hermosa
que el Gran Dios te ha regalado,
sólo te pido una cosa:
que me cantes un huapango
al pide de mi fosa.
Mi amado Papá:
sigo amándote, sigo echándote de menos, encuentro a faltar tus consejos y esas cartas llenas de sencillez y al mismo tiempo de tanta sabiduría; tú eras así: sencillo y sabio.
Semi ni mistazogta tata Amado!!!!