sábado, 29 de noviembre de 2008

"Por Amor"

Por amor escalas la montaña
mas alta y vertical.

Por amor nadas el océano
mas profundo y tempestuoso.

Por amor exploras la cueva
mas fría y oscura.

Por amor, aunque no tengas alas,
atraviesas el cielo del planeta entero.

Por amor ríes
cuando quisieras llorar.

Por amor eres ecuánime
cuando los problemas se acumulan.

Por amor escuchas pacientemente
cuando quisieras gritar de dolor.

Por amor disfrutas del silencio
en la sonrisa del otro.

Por amor ves que la vida
con todo y sus vicisitudes
vale la pena vivirla
y dejarse la piel en ello.


Por ese gran amor que siento de tí Abel, es como logro llevar mi vida adelante con alegría y optimismo.
Gracias cielo!.

sábado, 22 de noviembre de 2008

"Tears and Fears"




Ayer estaba escuchando una canción que me gusta mucho de la peli "Love Actually" y después de escuchar atentamente la letra, me gustaron dos palabras (entre un montón de frases hermosas) "Tears and Fears" ... riman muy bien... y entonces me vino a la cabeza que durante nuestra vida no estamos exentos ni de llorar ni de tener miedos; pero si los entrelazamos con todos los eventos bellos, como resultado tenemos una hermosa sinfonía de vivencias invaluables.


Algunas personas ven mi actitud como un acto de valentía... no sé si será eso, pero lo que si sé es que tenía dos opciones: o me dejaba avasallar por el dolor y la desesperación o dejaba que el Amor de Abel me inflamara toda entera.


He tenido muchos miedos en mi vida... sigo teniendo (como buen ser de carne que soy) pero cuando te encuentras contigo misma (que pocas veces he sido consciente de ello) es cuando el miedo se torna diminuto, como una mota de polvo.

Y creo yo, que muchas veces para ver la mota de polvo necesitas Luz; verla a través de los rayos de la luz.
Siento que así pasa con los miedos. La luz de la conciencia nos ayuda a verlos, a reconocerlos y a hacerlos a un lado con la mano o hacerlos que se disuelvan.
En realidad tenemos varias acciones para alejar las motas de polvo: soplarle para que se aleje de nosotros (a sabiendas que anda por ahí pululando a nuestro alrededor), no hacerle caso estando siempre a la expectativa de que se nos pueda enganchar en cualquier momento, o tomarla con la punta de los dedos, observarla y después de decidir si es útil o no en la vida, lanzarla al bote de basura para que desaparezca totalmente de nuestra vida.
Sin embargo, siempre habrá motas de polvo, pero depende de nuestra actitud para dejarlas flotar en el aire y no pretender encerrarnos en una burbuja hermética donde nada negativo nos pueda tocar, pero ¡qué lástima!, ¡también nos perderíamos de todas las sensaciones agradables!.
Yo he tomado la decisión de convivir con mis motas de polvo, algunas han desaparecido por sí solas, supongo que una fuerte ráfaga las alejó de mí; otras se han disuelto, algunas si he logrado darles caza y las he lanzado a la basura e infinidad de ellas andan por ahí escondiéndose de la Luz... no me angustio, algún día las encontraré y decidiré si las dejo por ahí o las alejo.
Las lágrimas son muy diferentes; podemos llorar también de alegría. Hay varias razones por las que sentirse tan inmensamente feliz que lloramos a mares. En realidad desde que Abel marchó casi no he tenido esta sensación, pero lucho por todos los medios para que vuelva a suceder.
Por el momento les dejo con unas frases que si valen la pena ser leídas:


“(...)No intentes olvidar lo que pasó, al contrario, recuerda. Sin morbosidad pero sin escapismos.
El proceso de duelo permite buscar para tu ser querido el lugar que se merece entre los tesoros de tu corazón.
Es poder pensar en él y no sentir ya ese latigazo de dolor.
Es recordarle con ternura y sentir que el tiempo que compartiste con él o con ella fue un gran regalo.
Y esto es cierto para todas las pérdidas. La elaboración permite darle un sentido a todo lo que has vivido hasta aquí con lo ausente.
Es entender con el corazón en la mano que el amor no se acaba con la muerte.En cierto modo, nunca volverás a estar como antes de una pérdida significativa, porque ésta inevitablemente te cambia, pero podés elegir si ese cambio será para mejor (...)” (de “El camino de las lágrimas” de J.Bucay).

martes, 18 de noviembre de 2008

"La quietud y el silencio"

Los dos días de este fin de semana, por varias razones estuve muchas horas fuera de mi casa.
Al llegar por la noche del Domingo, me invadió una rara, pero a la vez placentera sensación: estaba en casa, en mi mundo, tranquila, segura... en paz...
A pesar de llegar y escuchar el absoluto silencio de mi soledad no me sentí sola.
En uno de sus e-mails (aquellos que me escribía cuando estuve en México por lo de mi papá), Abel me hablaba de la diferencia entre la soledad y sentirse solo, sobre la quietud y el silencio; he aquí un extracto de sus letras:
“La quietud y el silencio”.

No hay liberación si se busca un resultado.
El amor existe por sí mismo, es un resultado del ser; y en ese estado el “yo” con sus identificaciones, ansiedades y posesiones está ausente.

Creatividad = libertad

Lonely = solitario, sentirse solo.
Alone = estar solo, libre independiente.

Loneliness (aislamiento) no es igual a Aloneless (soledad creativa).

La soledad es la conciencia del “yo” sin actividad.

Yo mismo soy la soledad, entonces ¿por qué temerme a mí mismo? ¿por qué huirme?.
Cuando la mente se de cuenta que ella es la creadora y experimentadora del Dolor éste llegará a su fin.

“De nada sirve el conocimiento sin sabiduría y no hay sabiduría sin espiritualidad” (proverbio chino).
Mientras mas recuerdos tengo, mas me impresiono de la forma en que Abel discernía sobre la vida, pero mas me impacta la manera en que me estaba preparando para afrontar mi situación sin ni siquiera saberlo ni él mismo.
Cada día estoy mas segura que somos unas piezas de un ajedrez inteligente en el cual las fichas se mueven por alguna razón y que tenemos nuestro trabajo en la vida; para aprender, para mejorar, para ser felices, para sufrir, para llorar, para perder seres amados y para ganar otros...
Me pongo a pensar qué es lo que he ganado con la súbita partida de Abel; he ganado mucho, algo incalculable; sólo que el precio ha sido demasiado alto.
El Domingo al llegar a mi casa, la paz que sentía tenía nombre: se llama Abel.
La energía de Abel me hace fuerte, valiente, sensible y al mismo tiempo me hace capaz de llorar a mares cuando lo necesito para después retomar aire limpio y seguir el camino.
Cuando sufro una crisis, de aquellas que nuevamente siento como mi pecho se rompe en millones de fragmentos, cuando el llanto sale desde las entrañas y cuando la impotencia se apodera de mis pensamientos y el dolor de mi cuerpo, después, cuando termina, toda yo me encuentro mas liviana...mas... como transparente.
Es entonces cuando pienso que todo esto está pasando en intervalos mas largos; siento que el optimismo regresa a mí y que puedo sentir a Abel muy dentro de mí para salir nuevamente adelante y aprender de lo sucedido.
Suelo ser muy necia, muy testaruda, muy rebelde, pero espero que con estas experiencias regaladas por Abel mi espíritu se apacigüe y sea un ser humano sereno y sabio; quiero serlo... o como me diría Abel "cada minuto de mi vida estoy siendo mas sereno, mas sabio"... "dar por hecho y se os dará" -me decía también (le gustaba mucho citar a nuestro gran Maestro Jesús).
En fin, que aquí tienen otro fragmento de mi vida con Abel; como siempre lo comparto con todos vosotros, porque quiero que lo que Abel nos enseñó en vida a todos los que tuvimos la gran dicha de conocerlo lo gritemos a los cuatro viento para darlo a los demás como el gran regalo de él.
Yo, mientras tanto, seguiré buscando, seguiré preguntando, seguiré cuestionando, seguiré recordando que en mi vida alguien sembró la semilla del Amor.

lunes, 3 de noviembre de 2008

"The prayer" (22 meses)

Hoy le quiero regalar a Abel esta canción. (Parar la música del Blog para escuchar el video)

sábado, 1 de noviembre de 2008

Uno y Dos de Noviembre

En la Casa Nortes-Rivera, Noviembre significaba no solamente castañas, panellets, moniatos y moscatel, sino también Chiles en Nogada; un platillo típico mexicano que se prepara especialmente en Agosto y se preguntarán por qué nosotros lo preparábamos en estas fechas tan cercanas al frío... la razón muy sencilla: porque es cuando me encuentro castañas para hacer la salsa que allá se hace con nueces de castilla (que aunque tengan este nombre, no las encontramos aquí).
Fue la mejor y mas cercana manera de mantener una tradición, que además de ser rica me mantiene ligada -por decirlo así- al sabor de mi tierra.
A Abel le gustaba mucho ayudarme a prepararlos, aunque después él no comía porque dentro de su elaboración está el coser fruta variada y a él nunca le gustó la fruta en ese estado... recuerdo que en el hospital no le podían dar comida cruda, así que le ponían manzanas al horno y siempre acababa comiéndomela yo para no tirarla y él pedía algún otro tipo de postre.
Así que, invitábamos a alguien para degustar nuestro logro, principalmente en estos dos primeros días de un mes que especialmente no me gusta.
Y hoy, el Otoño ha llegado verdaderamente; algunos días con lluvia y un frío que congela; no sólo el cuerpo, sino también el alma al recordar, aunque haga el esfuerzo de no hacerlo, de recuerdos tristes.
El Otoño tiene eso... la luz del sol nos acompaña pocas horas, igual que la permanencia de la ecuanimidad en mi vida.
Intento por todos los medios encontrar la razón para estar alegre, para sentir que la vida sin la presencia física de Abel sigue valiendo la pena, pero hay veces que la cuesta arriba tiene mucha pendiente y -tanto las piernas como el corazón- no tienen la suficiente fuerza para recorrer el sendero.
Estos días son mas tristes, especialmente porque "celebramos" El Día de Muertos, he puesto mi altar como siempre lo hemos hecho en mi casa de México, intentando cumplir con los ritos y las costumbres, sin tamales porque es muy difícil hacerlos aquí, sin hojaldras, sin calaveritas de azúcar, pero si con muchas flores y velas y agua y las fotos de los seres amados que han marchado antes; he puesto a la "yaya" Rosario (abuelita de Abel), a mi papá, a mi Abue Jose y... ¡¡¡nunca me hubiera imaginado que Abel también fuera protagonista!!!....
La primera vez que coloqué la foto de mi papá fue duro, muy duro; pero el primer Noviembre que puse la foto de Abel, la cazuelita con sus dulces y galletas preferidas, algunas pertenencias mas estimadas y todo cubierto de flores... el dolor fue asfixiante... una experiencia que sigue quemando por dentro, no de la misma manera que la primera vez, pero sigue quemando y mucho...
Contemplar las fotos de ellos dos me hace sentir que por algo han marchado pronto... "pronto"... para los que nos quedamos aquí siempre es demasiado Pronto y tampoco nunca es el momento... sin embargo, mis sentimientos son muy encontrados; pero el sentimiento de abandono todavía está latente; algunas veces agazapado, esperando un momento de sensibilidad extrema para abatirme.
Estos sentimientos son muy personales e íntimos, pero esta es una de las mejores maneras que encuentro para no sentirme rendida, abatida por aquellas emociones descontroladas.
Siento rabia todavía, impotencia, ese preguntar de: por qué Abel se fue si tenía muchas ganas de vivir, si era feliz, si profesionalmente estaba en un momento de plenitud, porque creo yo que espiritualmente había encontrado una Paz y Serenidad de Alma Grande y sentimentalmente... ¡qué decir!... teníamos una comunicación que iba mas allá de las palabras y una complicidad de dos locos enamorados...
Seguramente soy repetitiva, pero es algo que es muy mío: las emociones van y vienen, todavía tengo mucho dolor y sensación de impotencia; la aceptación la visualizo, pero todavía no logro hacerla mía del todo...

Comienzo a ordenar ideas, encontrar un punto de equilibrio entre los recuerdos y la vida que voy fabricando días tras día; sólo que hay temporadas que son mas difíciles que otras.

Vivir día a día es recordar a Abel; es tener actividades que tienen todo que ver con él y que ahora toca hacerlas sola y como decimos en México "amarrarme los calzones" y seguir adelante mordiéndome muchas veces los labios con el nudo en la garganta para no romper en llanto; y algunas otras que están relacionadas con mi desarrollo profesional y en las cuales no encuentro sus palabras de aliento; y aún así las hago de la mejor manera posible para vivir dignamente; se lo merecen las personas con las que convivo.

Si, son días difíciles, pero pienso que tengo derecho y es sano tener días así, también es bueno desfogarme, no guardar el dolor porque sólo crecerá como una enfermedad maldita, como aquella que arrebató a Abel de este mundo terrenal y de mi lado.

Estoy intentando seguir -como me decía Abel- "por el camino de menor resistencia"; canalizar el dolor y todo lo negativo hacia la fuerza y luz interior que me haga mejor persona y ser humano.

Mi gran amigo Natxo, en un comentario en el post anterior me dice que yo también soy una Alma Pura... lo dudo mucho; porque analizo la vida de Abel como punto de referencia y estoy lejísimos de serlo: porque Abel siempre veía con optimismo la vida, incluso cuando le diagnosticaron Leucemia; porque Abel siempre veía las virtudes de las personas; porque Abel nunca se desanimó ante las adversidades; porque nunca lo escuché hablar mal de nadie; porque Abel pensaba antes de hablar, el silencio y la contemplación eran sus mayores aficiones.

Una larga lista me hace sentir que me falta mucho por aprender, pero pongo toda mi Fuerza Espiritual para seguir el mejor camino; sólo que no es tan fácil cuando se tienen demasiadas imperfecciones.

Desde que Abel y yo nos conocimos supimos que nos encontramos para aprender uno del otro... yo creo que yo mas que él...

De momento, me quedo con el sabor agridulce de la ausencia; porque aunque no pueda estar físicamente con él, si estamos unidos por los hilos invisibles del amor, de esos que son fuertes, irrompibles e indestructibles.

Abel, amor mío, soy débil, pero tu Amor me está haciendo fuerte!